domingo, 7 de octubre de 2012

EXHORTACIÓN PASTORAL

7  de octubre de 2012

En nuestra iglesia, generalmente se administra la Santa Cena todos los primeros domingos de cada mes en el Servicio de Adoración y ocasionalmente en las visitas a enfermos, pero este domingo lo haremos con renovada disposición y particular entusiasmo, ya que es Domingo de Comunión Mundial y todos los cristianos que habitamos este planeta nos congregamos en torno a la Mesa del Señor.
Hoy más que nunca es pertinente preguntarnos...¿Qué es la Mesa del Señor?
Jesús, en la última cena, antes de su muerte, tomó los elementos del pan y del vino y los compartió con sus discípulos, diciendo que eran su cuerpo destrozado y su sangre derramada, señales del nuevo pacto.  Y mandó a sus discípulos que compartieran el pan y la copa, haciendo memoria de Él, anunciando su muerte salvadora, hasta que Él volviese.  Pero, a la luz de la Resurrección, la Santa Cena, no es meramente un memorial, es también presencia real de Cristo Resucitado que "se une a nosotros de tal manera que llega a ser verdadero alimento y nutrición para nuestras almas"(Confesión Escocesa 3.21).
¿Quiénes pueden participar de la Santa Cena? Todos los bautizados, que arrepentidos de sus pecados buscan reconciliación con Dios y con los demás, por medio de la confianza en Jesús, Señor y Salvador.  "Aún la persona que duda y cuya confianza está vacilante, puede ir a la Santa Cena de manera que llegue a sentirse seguro del amor de Dios y la gracia de Jesucristo"[Libro de Orden(W-2.4011)].
Un aspecto importante de la Santa Cena es que en ella no sólo celebramos y experimentamos el amor eterno de Dios en nuestra vida, sino que lo compartimos con los demás.  Por eso a la Santa Cena se le llama también Mesa del Señor o Comunión.

Rev. Salvador Gavaldá Costelló

No hay comentarios.: